Una alegoría que siempre resulta significativa.
Podemos comparar las aspiraciones y logros de las
personas con el vuelo de ciertas aves.
Hay personas que vuelan como las gallinas, hacen
vuelos cortos a ras del suelo.
Algunas personas vuelan como los pájaros, emprenden
vuelos alcanzando las copas de los árboles en cuyas ramas anidan.
Pero hay otras personas que vuelan como las águilas,
surcan el espacio a gran altura y anidan en las cumbres de las montañas.